Estamos, quizás, ante uno de los mejores libros escritos por Ernest Hemingway. Es bien conocida la rama periodística por la que siempre destacó el escritor Norteamericano, siendo de gran calidad tanto dichos artículos periodísticos como la larga colección de cuentos que nos dejó como legado. Muchos críticos aseguraron que la verdadera esencia de Ernest Hemingway se hallaba en los relatos cortos o “Cuentos” y que sus novelas nunca habían alcanzado el nivel de perfección que tenían estos. Pero después de haberme leído este libro he de mostrar mi desacuerdo con esta afirmación. Sí diré que algunas novelas como “Adiós a las armas” o “El jardín del edén” vemos trasfigurado un poco el estilo por el que siempre destacó el maestro: El dialogo directo y personajes perdedores que durante toda la trama están enzarzados en alguna batalla saliendo siempre derrotados.
Es en esta narración, de unas cuatrocientas páginas, donde se transmite la esencia del escritor en cada párrafo. Ernest Hemingway trabajó como reportero durante la guerra civil Española e ideológicamente se mostró a favor de la causa republicana. Es por ello que este libro narra la historia de un grupo de guerrilleros de la república asediados en las montañas donde esperan la llegada de un dinamitero “Robert Jordan”. Dicho personaje es un americano que participa en la guerra como voluntario y es alistado por la República para volar un puente. Dicho puente consiste en un punto estratégico utilizado por el bando nacional para atravesar la montaña y que tras el desconcierto provocado por su derivo, las tropas Republicanas aprovecharían para contraatacar desde el aire. Robert Jordan llega al campamento guiado por Anselmo, un viejo cazador que se vio atrapado en la revuelta y que conoce todos los rincones de aquellas montañas. Con la llegada del dinamitero, Pablo, que es el cabecilla de la guerrilla muestra una total desconfianza hacia el americano. El resto de la guerrilla, por su parte, desconfían en Pablo, quien últimamente se comporta como un cobarde y no hace más que beber. Este conflicto entre personajes crea un hilo argumental bastante interesante, pero la verdadera tensión argumental la encontramos en el transcurso del tiempo, es decir, conforme se acerca el día en que hay que volar el puente. Entre toda esta tensión surgirá el amor entre Robert Jordan y María, una joven que fue rescatada del bando fascista por el grupo de guerrilleros.
Desde mi punto de vista este libro nos muestra una versión muy objetiva de lo que realmente fue el conflicto bélico, pues a pesar de estar el autor inclinado ideológicamente hacía la República, es capaz de mostrarnos el lado más cruel de ambos bandos y sus formas de actuar. Por otra parte los personajes, en forma de monólogo interior, nos muestran sus temores ante la batalla, ante la muerte, el dilema que supone tener que matar a alguien y sobre todo una constante duda ante la imagen del futuro ¿Cómo será el futuro cuando todo termine?. La obra es un reflejo fiel de cómo era la vida en los últimos años de 1930, la relacción entre guerrillas, la forma de vestir, de comer, de amar y de sentir en los tiempos de guerra. Una gran novela sazonada con el inconfundible estilo de Ernest Hemingway.
Sinceramente, una novela que recomiendo a todos que lean.
grandiosa, lo mejor, menudos dias de verano mas buenos pase leyendola, una gran recomendacion, como muchas de las tuyas
Es un gran libro sin duda alguna hermano. De lo mejor del tito Hemingway. Por cierto, he empezado «Cinco horas con Mario» es muy bueno. Ya hablaremos.
Un abrazo.
Aún no he leído este libro, lo leeré dentro de unas semanas, cuando, después de los exámenes, tenga mi lista de libros un poco más vacía. De lo que sí estoy seguro es de que es una gran novela, la mejor, quizá, de Ernest. Todos los que han leído toda la biblioteca de Hemingway me han dicho que es la mejor. No dudaré en hincarle el diente en cuanto tenga la oportunidad.
‘Cinco horas con Mario’ es una gran novela, compañero. Refleja perfectamente el marujeo de la señora de Mario, y tiene un estilo inigualable, propio de don Miguel. Espero que te guste.
Un abrazo
Muchas gracías compañero. Ya veras como no te arrepientes de leerla, es una gran novela, para mí de las mejores que he leido.
«Cinco horas con Mario» es muy buena también. Me gusta mucho como poco a poco, con las críticas de su esposa, vemos caracterizado el personaje hasta tal punto que logramos comprenderlo y conocerlo a la perfección. Ya lo comentaremos mejor cuando lo lea.
Un gran abrazo.
Nunca he leido a Hemingway 🙁
Esta recomendación suena muy buena para comenzar.
Muchas gracias.:)
Ya veras como te gusta mucho Doris. Si no has leido nunca a Hemingway te llevarás una grata sorpresa.
Gracias por tu comentario.
Un abrazo.
De fábula viejo!!!.. Si que eso del arte y la cultura es en buena onda la neta del planeta, osease como dijera Chicaspier:
To be or not to be, y ahí por el estilacho no?….
Bueno banda, ahora si, ponganse a jalar, y dejense ay.
Saludos viejos,
Les saluda el chipocludo Fasolasi……
oh me gusta muchisimo estoy estudiando los escritos de Hemingway
FUE UN TIPO MUY INTELIGENTE AHORA SON POCOS…..
OYE nunca preguntes¿porquien doblan las campanas?