Una vez vista la teoría individualista, nos centraremos en la teoría neotradicionalista:
Esta teoría pertenece a la teoría tradicionalista. Los neotradicionalistas, consideran que las manifestaciones líricas son mucho más antiguas a las conservadas. En su tesis mantienen una actividad conciliadora entre el individualismo radical y el romanticismo exacerbado.
Menendez Pidal es considerado como el representante más cualificado dentro de una nominia bastante amplia. Las tesis pidalianas sostienen varios puntos:
1.La anonimia: Es comienzo de las literaturas. Hay que tener en cuenta que en la baja Edad Media el autor aspira a que su nombre merezca mención especial entre los literatos, siendo reconocida su obra, pero esto prevenía de una larga tradición anterior en la que no se hacía mención alguna al autor, es decir, en la antigüedad y en la alta edad media, la mayoría de los autores eran anónimos y estos se contentaban con satisfacer efímera mente las exigencias de su público.
2.La transición de las obras: estas pasaban por tres etapas:
– Primera etapa: El poema nacía en un lugar concreto, a una hora concreta y por un autor-juglar concreto.
– Segunda etapa: El autor recitaba públicamente su obra.
– Tercera etapa: Todos aquellos poemas que perduraban, eran de nuevo recitados de forma oral pero esta vez por los no-autores, sufriendo el poema constantes cambios.
3.Testimonios de crónicas: Varias crónicas encontradas, como pueden ser “La historia de Sahagún”, “La historia compostelana” y “La vida de Idefonsi Imperatoris” , que son anteriores al cancionero de Barena (obra considerada por los individualistas como el comienzo de la lírica castellana) reflejaban que en la vida cotidiana de los reinos de Castilla y León, había una constante actividad lírica, pero ninguna de aquellas composiciones ha llegado hasta nosotros. Ejemplos de estas composiciones son los testimonios que indican que a la llegada de un rey a un determinado pueblo, o tras la victoria de alguna batalla importante, el pueblo se lanzaba a la calle a cantar varios poemillas populares en la época.
A parte de todo esto, se consideraba a los villancicos como una imitación del “Cancionero de amigo” de origen galaico-portuguesa, pero el descubrimiento de las Jarchas(cantigas mozárabes) demostró que tanto las Jarchas como los villancicos están enraizados en la misma tradición de los siglos XI y XII.