¿qué les importaba
lo que esa noche iban a decir
de weber, de marx, de durkheim?
fue más fuerte aquella túnica de seda
que envolvió la mirada más dulce del otoño
y escaparon,
fundidos en una cósmica complicidad.
¿Qué les importaba
si amanecía jueves
o domingo
o lunes
si había que trabajar al otro día
o si la bolsa había bajado en wall street?
ellos eligieron un programa más sencillo
y decidieron cambiar la discusión
ya no importaba el ordene de las cosas
ni por que los hombres hacen lo que hacen.
¿qué les importaba
el suicidio altruista
el capital el trabajo?
prefirieron, mejor, imaginar
sus cuerpos cubiertos de espuma
desnudándose, deseándose
amándose sobre la playa solitaria.
¿qué les importaba
la crisis global,
el pana de mañana
los fracasos de ayer?
prefirieron tomarse de las manos
rozarse fundirse sentirse
decirse las verdades sin tapujos
pasear por la ciudad semi dormida
que los miraba entre sueños y sonriente
¿qué les importaba entonces
lo que el mundo tenía para decirles?
ellos quisieron bridar con grapamiel
y dormirse eternamente
en el beso repetido.