En esta ultima recomendación de año, nos inclinamos mayoritariamente por diferentes libros de poesías, para que cierres esta linda etapa con un buen sabor en tu corazón.
El traductor
Daoud Haria – Tendencias
La aventura conmovedora de un hombre que sobrevivió al brutal genocidio de Darfur. Hari creció en un pueblo de Sudan. Fue traductor y guiado a los periodistas, ayudo a denunciar al mundo la situación de la región.
Agua negra
Martín Rodríguez – Gog y Magog
Un poemario lleno de verbos transitivos, donde el autor se asoma en el narrador, para dejar algunas imágenes simples, mundanas hasta banales y, por eso, cercanas y entrañables, “un niño besa una raya de luz”, reza uno de los versos.
Ni jota
Paula Jiménez – Abeja Reina
Claudia Masin introduce los poemas ilustrados por la autora Taif: “Dos letras diferencian al humor del amor, una vocal y una muda. Pero se parecen. Quien ríe, quien ama, está a salvo de la fealdad y de la muerte”.
Devorando tinta
Fernando Ylarri – Dunken
Esas páginas vuelven a demostrar la infinita potencia de la poesía para abordar temas tan heterogéneos como el hambre y el desamor (o el olvido) son dejar de mostrar el secreto hilo que los zurce, misteriosamente con la vida.
420 minutos de abstinencia
Silvia Camerotto – Ediciones del Dock
Una abstinencia de sexo se cura con alcohol, parece decir la autora o viceversa: una abstinencia de alcohol se cura con buen sexo, parece recomendarnos en la página siguiente. Y si hay abstinencia hay culpa. Y, si no hay culpa, acecha la muerte.
Te recomendamos para el 2009 seguir el mundo literario a través de nuestra página y como siempre de la Revista Ñ.
estimada leticia: solo queria agradecer su comentario sobre mi libro Devorando Tinta realizado el dia 30 de diciembre
Desde ese dia sigo con interes el blog
un saludo grande fernando.