Hace ya dos semanas, un poco más, que terminé de leer esta novela, pero como el día que asigné para recomendar los libros por mi parte era el domingo, he tenido que esperar hasta hoy para hablar de él. No obstante, no tengo mucho que decir.
Nunca antes había leído ninguna novela de John Grisham, aunque me interesó al pasar por unos grandes almacenes y ver la portada interior de uno de sus libros, cuyo nombre no recuerdo, y vi una cita, un comentario de esos que hacen otros escritores o ciertos periódicos. El comentario era del famoso escritor de best seller Ken Follet, y decía así: «El mejor escritor de thrillers vivo», hablando de John Grisham. Por eso me interesó leer algo de él, pero nunca me decidí. Hace unas tres semanas, un familiar me prestó esta novela, de la que ahora hablo, y me dijo que era buena. Yo le hice caso y la leí.
Por desgracia, no puedo decir que sea el mejor libro que he leído, ni puedo decir tampoco que es uno de los mejores que han pasado por mis manos, porque hay grandes libros en el mercado, libros actuales, best sellers. No obstante, sí diré que la historia me ha conmovido, me ha impresionado y, salvo algunos momentos, me ha gustado en cierta parte. Me ha gustado la forma que tiene el autor de describir las escenas, la ciudad en la que el protagonista está viviendo, Bolonia. Pero lo que más me ha impresionado, y ya no es de la novela, sino de la nota final del autor, es lo que éste dice: «Mis conocimientos giran en torno al derecho, en modo alguno a los satélites y el espionaje. (…) No sé apenas nada de espías. (…) Si algo en esta novela se acerca a la verdad, probablemente es por error». Me parece una confesión bastante sincera, pues el autor, dentro de la novela, parece entenderlo todo acerca de los dispositivos electrónicos que el protagonista utiliza para comunicarse con cierto personaje, pero realmente John Grisham es, como se declara en esa nota final, un amante fiel a las máquinas de escribir y un total enemigo de los ordenadores. Frente a esto, cabe decir algo sobre el argumento y sobre el estilo de la novela.
El Intermediario es una novela de espionaje que cuenta la historia de un ex abogado que fue encarcelado por querer vender un programa capaz de poner en peligro el sistema de vigilancia por satélite más sofisticado del mundo. Después de largos años de cárcel, Joel Backman, ese abogado, es indultado y llevado a diferentes ciudades con el fin de estar escondido y con una intención macabra por parte de la CIA. La novela narra toda la vida que lleva el hombre en las diferentes ciudades, aprendiendo italiano, con otra identidad, con un pasado falso, con el pretexto de que no le descubran. Finalmente, vive una pequeña historia de amor, parte interesante de la historia, que le servirá de gran ayuda.
Es una novela con una trama bastante ingeniosa y que utiliza un estilo simple al narrar y complejo al describir las ciudades y sus monumentos. No obstante, no me ha parecido un gran libro, pero tampoco me ha supuesto una pérdida de tiempo: se lee rápido, en cinco días, cuatrocientas páginas, y tiene fragmentos entretenidos.
Nada más que decir, tan sólo que nos vemos la semana próxima con otro comentario sobre otro libro, aún no sé cuál, pero habrá título.
Hola! sabes que yo lei este libro y la verdad me gusto tanto que lo he leido mas de 2 veces, tu reseña es buena sin embargo te recomiendo leas mas material de John Grisham, el libro del «informe Pelicano» es muy bueno la vdd, te lo recomiendo ^_^.
Volviendo al libro, pues en gustos se rompen generos y la vdd a mi me encanta la manera en la el autor hace que te metas a la historia y aun mas, que te sientas casi el protagonista de la misma. Muy pocos autores tienen esa habilidad (o a la mejor yo tengo mucha imaginacion ^_^’)
Felicidades por tu blog, es muy informativo, ademas, la manera en como reseñas ciertos autores es tan interesante que me has hecho redactar una lista de los libros que tengo que conseguir…
Felicidades de nuevo ^_^
Kelly, muchas gracias por tu comentario. Me alegro de haberte servido de ayuda. Pues mira, la verdad es que este libro no me pareció una buena obra, pero claro, el juicio del lector siempre es subjetivo. Me gustaba al principio y a medida que avanzaba, fue dejando de gustarme. Sobre gustos no hay nada escrito, por eso me alegra ver tu opinión, que contrasta con la mía como debe ser.
Vuelve por aquí, te recibiremos con gusto.