Cuando perdi el poema

Cuando perdí el poema

Uno no le escribe poemas a la vida
Por que cree que la vida es iletrada
O desinteresada, o parca, o simplemente
Por que cree que a la vida
no le gustan los poemas.

Uno más bien, tira las palabras como balas
Las tira para otro lado
para otros labios,
para otros ojos,
las tira hacia otra orilla.

Y uno no sabe, en realidad,
a donde van todas las palabras
                                         pero las tira
                                                       pero las tira
lo cierto es que las tira lejos
(o al menos lo intenta)
Acaso como quien suelta una paloma
Acaso como quien arroja piedras.

Ahí es cuando uno aprende que las palabras,
Sí se van sin que las eches
ya no volverán aunque las llames.
Entonces se vacían las manos fastidiosas
Y se siente el vacío de las rimas asonantes
Pero yo no me arrepiento
de haber tirado las palabras
como palomas o como piedras.
Sino, mas bien, digamos me arrepiento,
De no haber hecho duplicados.